Madrid, la ciudad con más conventos de España

Por Macamen López Alemany, patrona de la Fundación DeClausura

En mi rastrear por los conventos de España, he recibido una grata sorpresa: Madrid capital es la ciudad con más conventos de España. Veinticuatro, ni más, ni menos. Después de Roma, es la ciudad con más conventos del mundo.

La constatación de esta realidad nos abre los ojos ante un nuevo Madrid desconocido que se nos ofrece.

Cada uno de ellos aparece como un foco de luz que alumbra la zona que le rodea: Sanchinarro, Carabanchel, La Latina, Arturo Soria, Chamberí, Salamanca, Argüelles, Madrid Central…

Vecinos de la Villa de Madrid

Muchos viven con la misma necesidad de los vecinos que les rodean; dificultades para pagar los recibos de la luz, alimentarse, pagar una obra necesaria… pero no se quedan ahí. Convencidos de la llamada que Dios les ha hecho, son fieles en lo pequeño y en lo grande, afrontando el devenir de la Historia que muchas veces les coge con el pie cambiado.

Afortunadamente, siguen quedando personas muy generosas con su tiempo, que no dudan a la hora de echarles una mano, algunos problemas derivados del uso de las nuevas tecnologías- aunque hay contemplativos muy avezados, casi siempre los jóvenes- pero también acuden a pedir consejo sobre facturas, contratos, obras que realizar y posibles timos que a veces se convierten en realidad.

Por eso mismo existe una reciprocidad, los contemplativos con su oración sostienen las vidas de los que les rodean, y la vida de la Iglesia, y por ese motivo siempre encuentran gente que les quiere de manera especial. Pero aún así, siguen siendo un mundo desconocido para muchos y por eso, poco valorado.

Ora et labora

Los conventos no viven del cuento, tampoco del aire… El ora et labora está presente en cada día de la semana, unos realizando pequeñas artesanías, otros haciendo arreglos de ropa, bordados, tintorería, ropita de bebé, imprenta, llevando papeles de bancos y también, más de los que pensamos, haciendo dulces de los que se hace la boca agua. Hay contemplativos de clausura constitucional que luchan por mantener sus colegios y residencias.

Hay lugares en Madrid en los que se respira paz.

Aún así, llegar a fin de mes se convierte en una auténtica aventura y el pago de la Seguridad Social es un dragón, por desgracia muy conocido. Imposible llegar.

Existen conventos antiquísimos y conventos modernos; conventos con un patrimonio artístico excepcional y otros que no lo tienen, conventos gigantescos y pequeños conventos, pero cada comunidad recibe al visitante con un cariño y generosidad muy similar. Se interesan por la persona, sus circunstancias, familia… No se hacen preguntas imprudentes, pero tú, que eres alguien que pasa por allí, no caes en el olvido, sus oraciones te acompañarán siempre.

 

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