El monasterio de Carmelitas Descalzas de la ciudad de Igualada, se inauguró el día 23 de octubre de 1949 con siete monjas procedentes del Carmelo de Vic.
Los inicios fueron complicados en la parte material, pues el monasterio era poco conocido y escaseaban los medios de ganarse la vida. Pasado un tiempo algunas fábricas de género de punto les dieron trabajo durante los años en que éstas estaban en auge en Igualada. También se ocuparon de lavar y planchar ropa de las iglesias. Hoy realizan una repostería con diferentes productos de una gran calidad.