El monasterio se fundó en 1940 de la mano de cinco religiosas llegadas de la comunidad de Vic: Madre María del Buen Consejo, Superiora; sor María Montserrat; sor María Pura, sor María Micaela y sor María Nieves.
Con los años la comunidad fue creciendo y, confiadas a la Divina Providencia, con el trabajo y sacrificio de todas las hermanas, se dio comienzo a la construcción de la nueva iglesia del monasterio, el 24 de octubre de 1973. Dos años más tarde, en la festividad de San José, el 19 de marzo de 1975, fue inaugurada y consagrada por el Eminentísimo Sr. Dr. Joan Martí Alanis, obispo de la Seu de Urgel y administrador apostólico del Obispado de Solsona.