El monasterio de Nuestra Señora de la Piedad, fundado en 1.523 está en pleno centro histórico de Palencia. Cuentan que un canónigo quería dedicar su herencia a fundar un edificio para la Iglesia. Dudó primero si levantar un hospital, pero cuenta la tradición que el Cristo que tenía en su oratorio le habló y le dijo: «Encierra a doncellas y a mí con ellas». Y así lo hizo. Ese Cristo está ahora en su templo.
De estilo dominante barroco, el conjunto monástico se organiza en torno a dos patios cuadrados, con edificaciones construidas en ladrillo, tapial y piedra de sillería. La iglesia, de gran originalidad, presenta una planta octogonal con una cúpula sin tambor y un alzado sobrio, caracterizado por la ausencia de grandes ventanales y la presencia de celosías decoradas con motivos mudéjares.
