Si tus oraciones son escuchadas y quieres compartir tu testimonio, rellena el siguiente cuestionario:
Quiero agradecer por las oraciones e intercesión a favor de mi hija Bárbara. Luego de tanto buscar, encontramos finalmente un colegio para ella. Gracias a Dios. Dios bendiga y proteja la vida contemplativa. Ustedes son nuestros hermanos y hermanas dispuestos a dar y compartir nuestras inquietudes y dificultades. Son el corazón para servir.
El año pasado pedí oración por mi primo que había sido diagnosticado con cáncer en estado terminal y con metástasis en varias áreas de su cuerpo. Ahora se encuentra bien, tiene una vida normal, toma dos medicamentos y el doctor dice que las células malas son casi indetectables. Le doy la gloria a Dios y mis agradecimientos eternos. Dios les pague por sus oraciones de intercesión.
Gracias por que mi esposo consiguió el dinero para pagar la cirugía de cervicales que urgían para mi,. Ya fui intervenida, la operación fue un éxito y la recuperación está siendo muy rápida. En menos de un mes de haberse hecho la petición. Gracias Dios por haber escuchado a los hermanos y hermanas contemplativas, te pido sigas bendiciéndoles y escucha mis oraciones para ellos.
Al poco tiempo de pedir que rezaran por él, mi marido encontró trabajo después de años en paro. ¡Qué eficaz es vuestra oración! Gracias a Dios por vuestra dedicación y por todo el amor que le ponéis.
Desde que oran por mi y mi pareja, estoy viendo la mano de Dios y la respuesta a sus oraciones sobre nosotros. Necesitaba un acompañamiento espiritual a través de la oración de hermanos en la Fe y esta Red de oración ha sido un regalo del cielo. Les doy las gracias a todos y todas los que componen esta obra de Dios. Camino con más confianza sabiendo que mucha gente ora por mis peticiones. Ustedes están en mis oraciones diarias. Gracias de corazón.
Gracias a los monasterios y conventos de Clausura por su noble labor de oración y de penitencia por la humanidad. Demos gracias a Dios y a la Virgen María por su constante intercesión ante Dios por nosotros.
Agradecemos profundamente a Dios por las gracias recibidas del Señor por medio de sus intercesiones, de los monasterios a los cuales enviamos nuestra petición. Nuestro querido José, quien necesitaba entrar en la lista de donantes de hígado, que era bien limitada, no sólo recibió esta gracia, sino que no pasaron dos semanas y apareció un donante y fue intervenido para recibir el órgano. Ahora está en recuperación de esta operación delicada y seguimos pidiendo la gracia de una buena recuperación. Gracias por tu intercesión. ALABAMOS AL SEÑOR DEL CIELO Y TIERRA, NUESTRO SEÑOR, JESUCRISTO POR SU MISERICORDIA. GRACIAS
El 23 de junio del año 2023 pedí sus Oraciones por mi hermana Claudia. Estaba embarazada y le habían dicho que sería un parto difícil por la trombosis y azúcar que padece. El sábado nació Oliver, su bebé, y doy infinitas gracias a Dios porque su misericordia es eterna y el tiempo de los milagros no ha terminado. Gloria a Dios y gracias a ustedes por sus oraciones.
Hoy me llamó Miguel, una persona a la que diagnosticaron un cáncer prácticamente sin esperanza de cura y pidió a los médicos que de todas formas le dieran los tratamientos. A nosotros nos pidió oración. El médico le ha dicho que el cáncer ha desaparecido.
El problema de salud por el que solicité sus oraciones se ha resuelto de forma milagrosa. Muchísimas gracias.
Pedí oración por una situación familiar muy importante y complicada. Las oraciones han sido escuchadas y, aunque el camino sigue, quiero agradecer a todos los contemplativos que rezan por mí. Yo también rezo por todos ellos.
El Señor siempre nos escucha, cómo todo buen Padre. Sin embargo sus oraciones, su entrega y compromiso por orar por nuestras intenciones, hizo la diferencia. Muchas gracias a cada uno de ustedes y que Nuestro Padre Misericordioso los bendiga infinitamente.
Esta Comunidad de Dominicas imprimen todas las semanas los nombres de las personas y lo llevamos al coro ante la Virgen, San José y, este año en su Jubileo, ante Santo Domingo, pero principalmente, cómo no, ante el Señor en el Sagrario. Leemos sus nombres para que con la fe que piden oración obtengan aquello que solicitan. El Señor conoce todo, pero hay que decirlo. ¡Cómo no! Tenemos todos, todos los nombres desde que empezamos esta correspondencia semanal vía e-mail. Un abrazo en Cristo.
"Gracias a los/las contemplativos/as que rezaron por mí. Pedí recuperar la confianza y fe en María, y se me concedió. Vuelvo a sentir su presencia, su cuidado y le rezo "sabiendo" que a ella le importo y que está presente. Llevaba meses sin experimentar esta gracia que tanto anhelaba. Bendito sea Dios y gracias y bendiciones a todos".