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Teresa de Lisieux: El pequeño camino hacia la santidad

Una espiritualidad accesible a todos

Santa Teresa de Lisieux (1873 – 1897), a menudo llamada Santa Teresita, es una figura emblemática de la Iglesia Católica. A pesar de su corta vida (murió a los 24 años), su influencia espiritual es inmensa y continúa inspirando a millones de personas en todo el mundo.

Su mensaje central reside en la idea de que la santidad no está reservada a unos pocos elegidos, sino que es accesible a todos, cualesquiera que sean nuestras debilidades o nuestros orígenes. De hecho, ha desarrollado un «pequeño camino» hacia Dios, una manera sencilla y directa de experimentar el amor de Dios en las pequeñas cosas de la vida diaria.

Los fundamentos de su espiritualidad

  • El amor infinito de Dios: Teresa está profundamente convencida del amor infinito de Dios por cada uno de sus hijos. Este amor incondicional es la fuerza impulsora de toda su vida espiritual.
  • Confianza en la misericordia divina: Nos invita a confiarnos completamente a la misericordia de Dios, a reconocer nuestros propios límites y a dejarnos transformar por el amor divino.
  • El pequeño camino: este es el corazón de su espiritualidad. Consiste en hacer pequeñas acciones con mucho amor, en vivir las virtudes ordinarias con extraordinaria intensidad. Nos anima a hacer de cada momento una ofrenda a Dios.
  • Infancia espiritual: Teresa se compara a menudo con una pequeña niña que se deja llevar en brazos de su Padre. Nos invita a redescubrir esta sencillez y esta confianza del niño.

Los principales aspectos de su espiritualidad

Teresa de Lisieux nos invita a vivir una relación personal e íntima con Dios, a descubrir la alegría del amor divino en las pequeñas cosas de la vida y a convertirnos en apóstoles de este amor. Su espiritualidad es una llamada a la santidad para todos, un camino accesible a todo aquel que desee seguir a Cristo.

  • Unión con Dios: Teresa aspira a una unión íntima con Dios, que ella llama “amor loco”. Esta unión se logra en las pequeñas acciones cotidianas, en el amor al prójimo y en la contemplación de Dios.
  • Sufrimiento: Ella ve el sufrimiento como una oportunidad para unirse más estrechamente con Cristo y demostrarle su amor. Invita a las personas a ofrecer sus sufrimientos por la salvación de las almas.
  • La misión: A pesar de su vida de clausura, Teresa se siente llamada a evangelizar el mundo entero. Quiere ser una “pequeña gota de agua” que contribuya al océano de la misericordia de Dios.

Teresa hoy

En 2025 celebraremos el centenario de la canonización de Santa Teresa de Lisieux (17 de mayo de 1925), una ocasión para descubrir o redescubrir a esta gran santa de la Iglesia y la espiritualidad de esta mujer proclamada Doctora de la Iglesia por San Juan Pablo II el 19 de octubre de 1997.

Por este motivo, la Provincia de París de las Carmelitas Descalzas y la Asociación María de Nazaret lanzan este 1 de octubre un servicio gratuito de correo electrónico diario llamado Teresa hoy.

Este correo electrónico estará compuesto por un breve texto de los escritos de Santa Teresita e irá acompañado de un breve comentario escrito por un hermano carmelita o un amigo del Carmelo.

Cada día de la semana el texto de Teresa hoy estará dedicado a un tema diferente relacionado con Santa Teresita:

  • Lunes, su autobiografía.
  • Martes, sus manuscritos.
  • Miércoles, sus poemas.
  • Jueves, cartas.
  • Viernes, oraciones.
  • Sábado, entrevistas y testimonios.
  • Domingo, milagros.

Si quieres recibir estos correos puedes inscribirte aquí.

2 comentarios en «Teresa de Lisieux: El pequeño camino hacia la santidad»

  1. Me parece muy interesante.
    Sugiero se dé a conocer más el caminito espiritual infantil.
    A mí parecer debería ser explicado como si fuera dirigido a niños de 7 años, dejemos salir a nuestro niño interior y como tal dirigirnos a Dios Padre. caminito explicado con sencillez, claridad y con numerosos ejemplos a copiar con la inocencia de un niño.
    Niño que de la mano de Jesús y María, con suma confianza y esperanza es llevado al amor de Dios Padre.

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