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Convento Madre de Dios de la Piedad, Sevilla, Sevilla

Dirección

Calle San José,4
Sevilla -Sevilla
41004- España

Horario

Visitas: De 9:00 a 12:30 y de 16:00 a 18:30

¿Hospedería?

Si

¿Tienda?

No

Convento Madre de Dios de la Piedad

Género: Femenino

Orden de Predicadores - O.P. (Dominicas)

Diócesis: Sevilla

La fundación del convento se produjo el año 1472, promovido por Isabel Ruiz de Esquivel, viuda de Juan Sánchez de Huete. En 1495 una inundación del convento, que se encontraba entonces en Triana, motivó la solicitud de ayuda a la reina Isabel I de Castilla, que les concedió unas casas de la antigua judería de Sevilla, pertenecientes a la comunidad judía.

El convento se organiza alrededor de tres elementos fundamentales fechables en el siglo XVI: la iglesia, un pequeño patio que hace las veces de claustro y otro de mayores dimensiones que sirve de jardín. La construcción de la iglesia, terminada en 1572, se lleva a cabo bajo la dirección de los arquitectos Juan de Simancas y Pedro Díaz de Palacios. Es de las denominadas de tipo de cajón, de planta rectangular y nave única, rematada con cabecera cuadrada y coro alto y bajo a los pies. En su interior sobresalen los artesonados de la nave, de la capilla mayor y del forjado del coro.1’ Cuenta con una bella portada a la calle San José, obra de Juan de Oviedo y de la Bandera del año 1590 que presenta una notable vistosidad que destaca sobre el paño continuo y sobrio de la fachada del convento, con una hornacina central que representa la virgen entregando el rosario a Santo Domingo y Dios presidiendo la escena, por debajo el escudo de la casa real y de los dominicos. El interior es de una sola y hermosa nave cubierta por artesones de rica lacería, de características mudéjares con cinco paños, fue contratado en 1564 por Francisco Ramírez, Alonso Ruiz y Alonso Castillo. Un arco toral sostenido por columnas dóricas con pinturas de Lucas de Valdés y antepechos de hierro forjado, ejecutados por Pedro de Valera, separa la capilla mayor del resto del cuerpo de la iglesia. El retablo mayor, elaborado entre 1702 y 1704, fue obra de Francisco de Barahona y contiene esculturas de otros retablos primitivos debidas a Jerónimo Hernández. De los retablos laterales, el del Rosario muestra una interesante colección de relieves de las postrimerías del siglo XVI; los de los Santos Juanes han hecho pensar en la intervención de Gaspar Núñez Delgado, uno de los principales escultores premontañesinos. Muy notable también es el situado en el segundo altar del muro del Evangelio con la pintura que representa- el «Entierro de Cristo». La zona de clausura se organiza alrededor de un pequeño patio que hace las veces de claustro, siendo uno de sus lados medianero con el coro de la iglesia. Tiene planta cuadrada y dos plantas de altura, con galería adintelada con columnas de mármol sobre pedestales en ambas y vigas de madera en la planta baja. En torno a este patio se despliegan distintas dependencias tales como el refectorio y el despacho de la abadesa en la planta baja y las celdas en la planta superior, siendo además usado como cementerio de la comunidad. El otro patio es de forma irregular con de tres galerías de tres alturas en algunos de sus tramos y a su alrededor se ubican parte de la antigua zona de dormitorios, la enfermería baja y algunas celdas. Hoy sirve de jardín y es lo que queda del primitivo huerto del convento, cuya fachada la componen la nave de la iglesia y una crujía lineal donde se encuentra la entrada, el torno, locutorios, la puerta reglar y de obras y vivienda del portero.